1) Documento informativo
dirigido a los food trucks, con los requisitos para participar, documentación exigida (IAE, Carnet manipulador, Seguro RC, Certificado Seguridad Social, Cetificado veterinario, Homologación food truck, …), los horarios del evento y de montaje, las necesidades técnicas, etc.
2) Buena campaña de comunicación
y visibilidad en prensa; realización de cartelería con las gastronetas que participan y su oferta gastronómica, y difusión y seguimiento del evento en las principales redes sociales. Es conveniente que se les proporcione toda la información posible –recursos gráficos, datos sobre actividades complementarias, etc.- para que puedan moverla en sus respectivas cuentas de Facebook, Twitter, etc.
3) Tarifa razonable
para el food truck, basada en el volumen de negocio esperado. Hay que tener presente que, más allá del romanticismo que puede haber en torno al movimiento callejero, un restaurante sobre ruedas no deja de ser una empresa, que además tiene muchos gastos (desplazamientos, personal, género, seguros, pernoctaciones, etc.) y que solo acudirá a un evento si piensa que le va a ser rentable.
4) Servicios necesarios para el food truck
tomas de electricidad (algunos son autosuficientes unas horas pero otros deben estar conectados todo el tiempo), seguridad y vigilancia en el recinto en el caso de que las gastronetas pasen la noche en el mismo, acceso a agua…
5) Espacio para guardar género en condiciones óptimas
de frío, respetando la normativa sanitaria. En eventos de fin de semana o de varios días, es difícil que los food trucks puedan tener todo el género que van a necesitar dentro de las cámaras del vehículo. Nos permitimos añadir que, incluso, estaría bien contar con un almacén para que estos restaurantes sobre ruedas puedan guardar todo aquello que vayan a necesitar –menaje, utensilios de cocina, productos no perecederos, etc.-, y evitar así la imagen (y problemas que se puedan derivar) de food trucks con cajas amontonadas en la parte trasera o laterales.
6) Posibilidad de vender bebida
Es cierto que muchos eventos salen adelante gracias al apoyo de grandes marcas de bebida, que participan con su propio stand y establecen como requisito que nadie más pueda vender refrescos, cerveza, etc. Pero no es menos cierto que entonces a los food trucks les baja bastante la rentabilidad que pueden obtener por participar en el evento.
7) Acciones o actividades de animación paralelas
que atraigan a un mayor número de personas: charlas, talleres gastronómicos, juegos para niños, actuaciones, conciertos, actividades de mañana (brunchs, vermuts…), etc.
8) Variedad gastronómica
Hay que intentar que el evento incorpore diversas propuestas culinarias para, en primer lugar, satisfacer los distintos gustos del público asistente y, en segundo lugar, para evitar la competencia directa entre dos food trucks que venden el mismo producto.
9) Zona de comida con mesas, sillas, etc
Resulta fundamental disponer de un lugar agradable en el que poder degustar las diferentes propuestas de las gastronetas.
10) Emplazamiento atractivo
Cuanto más encanto y servicios tenga la ubicación, más sencillo será que haya foodies o gente interesada en acercarse a pasar una jornada de street food. En definitiva, cuando se trata de organizar un evento, el mejor consejo es utilizar el sentido común, para que todas las partes implicadas en el mismo – los propios organizadores, los responsables de los food trucks y los asistentes– se sientan cómodas y correctamente atendidas.