Julián Yukihisa y Alícia Vicens son los emprendedores que están al frente de La Pickup, un precioso food truck metalizado que recorre las carreteras de Mallorca con una potente apuesta gastronómica basada en la materia prima local de primera calidad.
1) ¿Cómo os adentrasteis en el movimiento Street Food?
Diversos viajes a Estados Unidos nos abrieron los ojos respecto al potencial que tenían los food trucks. Allí vimos furgonetas totalmente equipadas con campanas de extracción, mesas de acero inoxidable, cámaras de frío… ¡y encima vendían una comida increíble! Así que en 2010 escribimos nuestro primer proyecto serio de food truck aunque se quedó en un cajón hasta que, en 2014, animados por otros proyectos que estaban apareciendo en la Península, decidimos hacer realidad nuestro sueño.
2) ¿De dónde viene el nombre de vuestro food truck?
Pretende ser un juego entre el verbo “To pick up”, es decir, comida para recoger en la caravana y el modelo de furgoneta americano “Pickup”. Luego castellanizamos el nombre añadiendo el artículo femenino “La Pickup” como si fuésemos un grupo de rock and roll español de los sesenta.
3) ¿Cuál es vuestro plato estrella?
Nuestro plato estrella es el Porc Negre Grilled Cheese Sandwich, un bocata de pan inglés, cerdo negro mallorquín, semillas de mostaza y nuestra mezcla especial de quesos.
4) ¿Qué os convierte en un food truck único? ¿Por qué deben visitaros?
Nuestra seña de identidad es el porc negre mallorquín, una raza autóctona de la isla considerado el tótem por excelencia de nuestra gastronomía. De este cerdo, que es similar al ibérico, se saca la carne para hacer las sobrasadas de porc negre, conocidas por ser de mayor calidad y gran untuosidad. Nosotros, con el porc negre, hacemos desde gyozas hasta tacos mexicanos.
5) ¿Cómo os imagináis el mundo del street food dentro de cinco años?
Nuestro objetivo no es que un food truck pueda estacionar donde quiera. Simplemente nos gustaría que los ayuntamientos estuviesen abiertos a celebrar una vez al mes festivales al aire libre en parques y zonas públicas para dinamizar las ciudades, sin que eso tuviese que implicar peleas con el sector de la restauración o problemas burocráticos absurdos. ¡Ah! Y, cómo no, complementar la oferta gastronómica en esos festivales con la musical.
6) Qué tres consejos daríais a futuros emprendedores del sector.
En primer lugar, que redacten un buen plan de negocio; en segundo lugar, que le añadan un buen margen de maniobra -¡creednos, lo necesitaréis!-, y en tercer lugar, no dejéis de innovar en cocina.
7) Y para terminar, ¿nos podríais contar alguna anécdota que os haya ocurrido con vuestro food truck?
Cuando viajas a la Península en ferry, puedes optar por dos compañías que salen exactamente a la misma hora. Pues bien, en nuestra segunda incursión a la Península para un festival de food trucks, cogimos uno de esos barcos a Valencia y a la media hora de estar en alta mar, tuvimos que ir a rescatar al otro ferry que también iba a Valencia porque estaba en llamas. Ninguna de las personas que iba en ese barco sufrió daños pero los cientos de camiones, furgonetas y coches que transportaba quedaron reducidos a cenizas. El ver aquel desastre nos hizo ser conscientes de que podíamos haberlo perdido todo. Solo con haber escogido el ferry de la otra compañía, todo nuestro sueño se habría ido al traste. Nunca olvidaremos ese día ya que sentimos que se nos dio una segunda oportunidad.