El programa radiofónico Hora 14 Fin de semana de la Cadena SER, puso el foco en el mundo food truck y nuestra compañera Leire, tuvo la oportunidad de contestar algunas cuestiones sobre el día a día de las gastronetas en España.
Encantados de haber participado, gracias.
Los food trucks intentan hacerse hueco en España. Estas camionetas vintage reconvertidas en un restaurante ambulante, también llamadas “gastronetas”, son todo un éxito en las grandes urbes: Nueva York, Londres, Berlín. Pero en España la normativa depende de cada municipio.
“Los food trucks no son ilegales en España. Lo que dice la ley es que es cosa de los Ayuntamiento emitir un ordenanza que regule el dónde, el cuándo y el cómo de esta práctica”, explica Leire Pérez, foodtrucker de dos “gastronetas” y promotora de la primera guía para food trucks, Foodtruckya.
Sevilla, Vitoria o Bilbao son algunos ejemplo de ciudades permisivas, pero no es lo habitual: “La mayoría de las veces el desconocimiento, el no saber ni lo que son, es lo que hace que se prohíban de antemano”, declara Leire. Aun así, los foodtruckers han encontrado la solución a su problema legal: “Los foodtrucks pueden estar, sin problema, en eventos privados y festivales“, explica Alba Yáñez, experta en gastronomía y autora del libro Foodtrucks, comida de autor sobre ruedas.
Foodtruck Xperience en Torremolinos, Foodie Village en Benicasim o GastroTruck en Roquetas de Mar, son solo algunos de los festivales gastronómicos organizados por y para “gastronetas”. Los foodtruckers se agrupan a asociaciones, una suerte de “sindicatos” que se encargan de pactar con los organizadores de estas fiestas culinarias las condiciones: “De esta forma se aseguran unas condiciones mínimas de agua, generadores eléctricos, y un mínimo de clientes”, explica Yáñez.
Leire Pérez es optimista sobre el futuro de los food trucks en España: “Poco a poco los ayuntamientos se dan cuenta de que son una alternativa gastronómica, que no es una competencia desleal si está bien regulado“, declara la propietaria del food truck Hambrocar.
De momento, y hasta que los ayuntamientos se pronuncien, se puede disfrutar de estas “gastronetas” en bodas, bautizos y festivales.
Ver artículo original: “Las gastronetas buscan aparcamiento en España“